Nº8719600510: Arnaldo eta besteak askatu!

Arnaldo Otegi deberá continuar portando el Nº de recluso 8719600510 por un largo periodo de tiempo, así lo ha impuesto la Audiencia Nacional mediante el fallo emitido el pasado viernes en la resolución del juicio BATERAGUNE (ver la sentencia íntegra). La sentencia ha sido firme y ha impuesto diez años de prisión para Arnaldo Otegi y Rafa Díez, mientras que a Sonia Jacinto, Miren Zabaleta y Arkaitz Rodríguez han sido condenados a ocho años. Una resolución incomprensible en Euskal Herria y más aún desde la perspectiva de normalización y pacificación.

Sin embargo la sentencia, aún siendo un jarro de agua fría para los sectores que ansiamos abrir un nuevo escenario de paz, justicia y normalización en nuestro país, no es mas que una muestra de increible intransigencia y debilidad del Estado Español. Este juicio se había convertido en una patata caliente de dificil solución en la nueva situación abierta por sectores abertzales y de izquierdas en los últimos años en Euskal Herria. Los aparatos de estado son muy conscientes de que la libertad de los encausados constituiría un impulso en las próximas elecciones generales para la opción independentista. Además una resolución absolutoria podria generar división y cruces de declaraciones entre PP y PSOE como ocurrió con la sentencia del Tribunal Constitucional con el caso de BILDU, debilitando los posicionamientos unionistas y de estado. Por ello han adoptado la solución condenatoría, con el objeto de evitar males mayores.

.

A pesar de todo ello, este tipo de decisiones no hacen mas que agrandar a pasos agigantados cada vez más la distancia existente entre Madrid y Euskal Herria. La cerrazón del estado Español en utilizar todos los medios a su alcance para pertuar la situación de bloqueo con repecto al tema vasco y evitar por todos los medios la apertura un marco democratico donde todos los proyectos políticos sean realizables y sea la propia sociedad vasca quien pueda decidir con total libertad sobre ellos,  fortalece cada vez más la opción independentista como unica vía para la consecución de una situación  verdaderamente democrática para todos.

La condena busca dinamitar el proceso, minar las esperanzas populares y enfriar los ánimos de los sectores soberanistas y de izquierdas, pero se equivocan al pensar que las medidas represivas van a paralizar el camino emprendido por los sectores independentistas y populares del país. Ni las sucesivas redadas contra militantes independentistas ni la resolución de la audiencia nacional contra BILDU sirvieron para ello, ni en este caso la sentencia contra los dirigentes de la izquierda abertzale servirá. El país ya esta marcha y avanza por el camino que ellos trazaron: Aglutinación de fuerzas,  lucha de masas, construcción popular y búsqueda alianzas en ámbitos internacionales. Continuamos en marcha… AURRERA EUSKAL HERRIA!